13 de agosto de 2007

Crónica Leyendas del Rock ´07

Finalizó la segunda edición del que antaño se llamase Mazarock , y podemos afirmar que se superaron las espectativas con creces. El evento se celebró durante los días 9, 10 y 11 de agosto junto a la playa de Bolnuevo en el Puerto De Mazarrón (Murcia) y contaba con dos escenarios para la alternancia fluida entre grupos. Cerca de los dos escenarios se acondicionó una zona de acampada con duchas (muy pocas y cobrándose a partir del primer día) y cabinas wc a unos cien metros de la línea costera. La zona mejoró bastante a la del año anterior, tenía más sombra y amplitud, debido obviamente a la mayor duración del festival y a la mayor cantidad de aficionados que se dieron cita. No contamos con cifras oficiales, pero se puede afirmar que hubo un número elevado de personas, claramente superior a las diez mil.

El primer día (jueves 9) era de entrada libre, y tocaron varios grupos locales para abrir boca al cabeza de cartel: los andaluces Medina Azahara. La sensación que dejaron los teloneros fue muy positiva y a mí en particular me sorprendieron Sealen y Neverland. Después llegó el plato fuerte de la noche, Medina Azahara, que fue el grupo que tocó más tiempo (cerca de dos horas) y siguiendo en su línea ofreció un buen espectáculo de rock andaluz. Lo más destacado en esta ocasión fue el nuevo bajista, Pepe Bao (ex de Barón Rojo,Triana,O´Funk´illo) en sustitución de J.M.Fernández. Lo cierto es que el grupo ha encontrado un nuevo sonido con la inclusión de este excelente bajista que domina el arte del directo.

El segundo día tuvo un cartel que impresionaba, con multitud de grandes del heavy nacional. Entre otros tocaron para empezar Acequia, Katie King, Zarpa y Tako, todos ellos con un buen sonido, aunque unas horas en las que el público no abunda debido al calor propio de estas fechas veraniegas. Pero aún así, a las 17:30 se presentaba al público una tentación irresistible: Silver Fist, con el que el público se desperezó y se unió a gritar grandes himnos como "Ave Fénix" o "Predicador", rebosantes de metal y tralla. Muy recomendable su último disco "Lágrimas de sangre", del que tocaron varias canciones y que supone un salto de calidad en el grupo con guiños al Trash y Speed metal. Lo que venía después no tenía tampoco desperdicio: los predicadores del sexo libre, Lujuria. Simplemente heavy metal. Óscar , como siempre, demostró su poder para levantar las masas y mandó saludos cordiales al papa y a los fachas de telemadrid y a la madre que los trajo al mundo, y el públicó enloqueció ante sus temas clásicos, como "Estrella del porno", "Escuadrón 69" o "Corazón de Heavy Metal". Después de este raudal de metal, tocó Leize, uno de los pocos grupos que no había eschudado anteriormente y dejó también muy buen sabor de boca. A continuación, después de un buen tributo a Banzai/Tritón llegaba Saratoga, con la nueva formación. Podemos afirmar que el grupo sigue vivo, aunque tenga otros nombres. Muy buena impresión dejó su nuevo guitarrista, Tony Hernando, que tenía la obligación de suplir al que fuera media alma del grupo junto a Nicko del Hierro, Jero. Pero lo hizo con un buen nivel, al igual que el cantante, Tete Novoa, con unos registros vocales similares a los que tuvo en su día el el grupo el anterior cantante, Leo. Visto lo visto, el nuevo disco que están grabando ahora en el estudio, seguro que es un buen pastel para la boca. Y para no dar tregua, el show continuó con Los Suaves, con el siempre excéntrico Yosi, que llegó en buen estado (ebrio, quiero decir) para dar al público sesenta minutos de buen rock. Esperemos que el grupo continúe su andadura por el mundo del rock durante mucho tiempo. Y unos que seguro que siguen mucho tiempo son los asturianos WarCry. Las masas más jóvenes se desbocaron y se pusieron en primera fila para animar, saltar y gritar los buenos temas de esta formación que estuvieron tan cañeros como siempre, dando un espectáculo que dejó a todo el mundo contento. Para seguir la noche, ya a las 00:30 de la noche tocó Ñu, con un buen nivel también y ofreciendo una hora y cuarto de su particular folk-metal . Cuando la gente se creía que esto se empezaba a relajar después de escuchar las flautas del maestro Molina llegó el cañón metalero de Panzer primero, y de Obús después, dando todo un recital de los buenos, con un Fortu eufórico que chillaba como si su voz saliera de los mismos infiernos. Y por último, para rematar la faena, llegaba la guindilla, Templario. Otro grupo que debería ser aún más reconocido en el mundillo, porque su calidad es excelente y demostraron que siguen en primera línea de batalla.

Y llegó el tercer y último día de festival, un día que tuvo un comienzo suave aunque contundente con un grupo prometedor, Angelus Apatrida a eso de las doce y media, por lo que no gozaron de mucha compañía. Posteriormente tocaron Blash/Chacal, Miguel Oñate (ex de los Asfalto), Badana y Blash con miembros de Panzer, grupos de los que no disfruté por motivos nutricionales. Pero la cosa se volvió a caldear con Tierra Santa y su siempre buen rollo rematando con aquella de "Con cien cañones por banda viento en popa a toda vela". Luego vino el grupo con el que se iniciaron los de Castro, Coz, con un breve inciso de apenas una hora. Y Sherpa, que tocó un buen concierto, aunque todo sea dicho, sus mejores temas son los de los barones: larga vida al rockanroll, Cuerdas de acero, Hijos de Caín etc. Aunque laro está, con su voz suenan y recuerdan a las primeras andaduras de los barones. A eso de las 19:00 tocó un grupo que tampoco conocía: Sobredosis. ¡Qué ignorancia la mia! Sobredosis es una formación ochentera que llegó a telonear a los Judas Priest allá por 1983 y sacó dos discos producidos por Fortu. Hasta los que no lo conocíamos acabamos gritando esa de "Caliente como un volcán". A continuación llegó la primera actuación extranjera del festival, el ex-cantante de Iron Maiden, Paul Di Anno. Sabemos que no es Bruce Dickinson, pero dio un buen concierto, demostrando que aún conserva un buen potencial de voz y estuvo acompañado por una buena banda. A los temas que sacó más partido fueron a los del album Iron Maiden, el único en el que contribuyó con la doncella de hierro. Los mejores fueron "The Phantom Of The Opera" y "Wrathchild", en los que el público se unió a sus constantes provocaciones y brincó al son de sus gritos. Y ahora llega lo mejor sin ningún género de dudas del festival: Barón Rojo. Dieron un concierto de los de quitarse el sombrero. Admirable el entusiasmo que siguen mostrando después de 25 años de heavy metal y de hacer miles de kilómetros por las carreteras de este país y parte del extranjero. No puedo concretar un tema concreto, ni siquiera una lista de ellos porque se salieron en todos y cada uno de ellos. Todos sabemos cuáles son. Increíble además cómo congregaron a todo el mundo en torno al escenario cantando como una sóla voz. Está claro que los viejos rockeros nunca mueren. Y para seguirles nada menos qu los argentinos Rata Blanca. Espectáculo garantizado con la bella voz de su cantante y la exhibición de acordes de su guitarrista, Walter Giardino. El concierto se hizo muy corto, ya que se quedaron muchos temas en el tintero, pero la organización no les dejó más, y sin embargo sí al grupo siguiente, tal y como se comentará posteriormente. Como acostumbran, se despidieron con "La leyenda del Mago y el Hada" y "Mujer Amante", que fueron coreados por todos. Un auténtico lujazo para los oídos. Después llegaba Sepultura a los que la organización concedió más de hora y media de concierto y que contaba con un único miembro de la formación original. Simplemente ofrecieron su dosis de brutalidad típica. Al que le guste, que lo disfrute, pero el menda prefirió tomarse un piscolabis mientras los oía de fondo. Al que no me perdí fue a Rosendo, que sigue dando todo en los escenarios, aunque sus primeros temas fueron más suaves fue gradualmente introduciendo temas más cañeros del tipo "Pan de higo" "Picaporte",y la siempre aclamada "Maneras de Vivir". Para seguirlo, The Pink Tones, grupo tributo a Pink Floyd, que tocaron los clásicos de dicha banda. Y para rematar el festival, los gaditanos Sauron que dieron un gran show con una espectacular puesta en escena. Sus temas fueron más heavys al principio procedentes la mayoría del último disco, Juglarmetal, y poco a poco introducieron temas más clásicos con instrumentos más exóticos como la gaita y laúd. Su espectáculo fue muy completo: violinista, fuegos, antorchas, hadas lanzando pompas de jabón al público y juglarillos saltando por el escenario, por lo que el público se divirtió de lo lindo a pesar de que eran más de las cinco de la mañana y se llevaban tres días de concierto. Y eso fue todo por este año. Ya sólo quedan 364 días para el del año que viene, el cual esperamos con más ganas si cabe que éste.
Bok-off

3 comentarios:

Anónimo dijo...

iyo musho ablá de que ha zio un peasso fehtivá y no dises ná de lo guarro que zoi to lo jevih. Verguenssa o tenía que da a to llevah eza pelandrerah como la mujereh. Na ma que mierda eh lo que vai dejando po donde vai. ojo: y a mi me guhtan musho loh iron maidén ezo pero ejque una koza ez la muzica y otra eh lo guarroh y lo mugriento que vai. donde ze ponga un mushasho bien puehto , pelaico, con zu kamiza de ahmani y uno zapato de piel de lagahto que ze kite lo demá. No zé pohqué no ze pué ih vien puehto a ezo conciertoh.

Anónimo dijo...

ombre to la rason del mundo tienes quillo asi como tu dices tenian que to los jevis esos yo creo que el pelo largo en tio,eso siempre a sio de maricones,pa lavarolo y esas cosas no os da por culo,unos enreos,y un mierderío en to el pelo que eso da asco,que tanta pasión por el heavy,ni mierda hay que un tio y un tio lleva siempre el pelo cortico,y el tio va siempre afeitao,coño,LONG LIVE TO THE HEAVY METAL FOREVER.

Anónimo dijo...

¿Por qué no te callas, puto cateto friki opinador? Si tienes tantos guevos di quien eres cacho de mierda remojá en berberechos de diarrea fétida putrefacta.